viernes, 3 de agosto de 2007

ELECCIONES EN OAXACA ¿NUEVOS VIENTOS DE CONFLICTO?

Servicios para una Educación Alternativa A.C.

“No hay plazo que no se cumpla”, reza un refrán de la sabiduría popular; esta frase bien podría aplicarse a la cita que tiene la ciudadanía oaxaqueña durante el presente año. En efecto, a lo largo de este año se realizarán elecciones de diputados al Congreso Local de Oaxaca y se nombrarán concejales para los 570 Ayuntamientos del estado, 418 por el régimen de usos y costumbres y 152 por la vía de los partidos políticos. Esto significa que en el transcurso del año tendremos una intensa actividad política, pues si bien las elecciones para diputados –5 de Agosto– y concejales municipales –7 de Octubre– tienen una fecha determinada, en aquellos municipios que eligen autoridades por el sistema de usos y costumbres se realizarán asambleas comunitarias de nombramiento de autoridades durante todo el año.

Estas elecciones se desarrollarán bajo circunstancias de gran inestabilidad política. La crisis social que estalló en el estado a mitad del año pasado aún no está plenamente resuelta; todavía se observan las secuelas producidas por el conflicto y se padecen los graves costos sociales que esta crisis de ingobernabilidad produjo. Sólo por mencionar algunos casos podemos hacer alusión al problema educativo en la entidad propiciado por la toma de más de 188 escuelas públicas; estos centros educativos fueron tomados durante el conflicto político por padres de familia instigados por autoridades municipales simpatizantes del PRI, o bien, por maestros del Comité Central de Lucha (CCL), el ala disidente de la Sección 22 del SNTE. Ahora estas escuelas no quieren ser devueltas a los maestros de la Sección 22, situación que ha generado enfrentamientos violentos entre maestros y padres de familia.

Otra situación grave es el enfrentamiento en municipios del estado, en particular en los municipios donde se constituyeron Ayuntamientos Populares. En algunos municipios de Oaxaca, se desconocieron autoridades municipales y se nombraron autoridades del pueblo, este es el caso de San Antonino Castillo Velasco, Santa María Atzompa, Villa de Zaachila, San Juan Lalana, entre otros. En estos municipios se observan signos alarmantes de confrontación, ya que una vez mermada la intensidad de la crisis en el estado ahora se están “cobrando cuentas pendientes” tanto a simpatizantes de la APPO como a simpatizantes del PRI. Además de estos problemas políticos podemos destacar la creciente movilización social en demanda de la liberación de los presos políticos, exigiendo respeto a los derechos humanos y en contra de la permanencia de Ulises Ruiz Ortiz en el Gobierno de Oaxaca.

Llegamos a las elecciones de este 2007, en medio de esta oleada gigantesca de conflictos y desencuentros políticos. Además, por si esto fuera poco, llegamos a estas elecciones gracias a una resolución emitida por la Suprema Corte Justicia de la Nación mediante la cual deja sin efecto parcialmente una Reforma Electoral promovida por el Congreso de Oaxaca en el mes de septiembre de 2006. Esta Reforma Electoral, realizada en el momento climático de la crisis oaxaqueña, consistía en reducir periodos de campaña, suprimir la facultad al Congreso de calificar las elecciones, reducir prerrogativas a los partidos políticos, pero además consistía en ampliar una año más el periodo a los diputados y presidentes municipales, de modo que tendríamos elecciones hasta el año 2008. Esta última parte de la Reforma Electoral fue lo que la Suprema Corte dejó sin efecto. Estas son las condiciones políticas en las cuales se desarrollará el proceso electoral en Oaxaca.

Un aspecto que preocupa de manera especial es la persistencia de prácticas de compra y coacción del voto. En las elecciones federales del 2006, EDUCA y el Foro Ciudadano de Oaxaca, documentaron las siguientes prácticas de compra y condicionamiento del voto:

Acopio de materiales y despensas en bodegas oficiales, entrega de herramientas y despensas, solicitud de credenciales de elector, pagos por asistir a mítines de campaña, y promesas de servicios públicos o cumplimiento de programas sociales. Presunto condicionamiento del voto a 10 mil taxistas con concesiones irregulares.

Uso de Programas Sociales Estatales para impulsar las candidaturas: Programa Piso Firme, Unidades Móviles para el Desarrollo, Módulos de Maquinaria y Programa de Alfabetización de Adultos.

Los Medios Informativos Públicos, en especial la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión de Oaxaca, hicieron uso del espacio público para promocionar y dar cobertura a los candidatos del PRI, además de publicitar las obras y entregas de recurso del Gobierno como si se encontrara en campaña.

Canalización de recursos públicos a través de ayuntamientos. Intimidación contra presidentes municipales de la sierra norte, sierra sur e istmo, que en caso de no ganar el PRI en estos municipios, ya no recibirán recursos o se les practicarán auditorias.

Coacción laboral, en especial en oficinas gubernamentales, con la conformación de redes de apoyo. Obligaron a los empleados a llenar listas con nombre de votantes y número de su credencial de elector, así se les obligó a atraer votos al PRI.

Desacato por parte del Gobernador Ulises Ruiz Ortiz al Acuerdo de Neutralidad Política, promovido por el Instituto Federal Electoral, ya que además de hacer públicas declaraciones en el sentido de restar interés a este acuerdo, recorrió el estado haciendo proselitismo político electoral, entregando apoyos sociales y llamando a votar por los candidatos del PRI.

Este es el tamaño de la situación en nuestro estado, así también son los grandes retos y desafíos que tenemos por delante. Oaxaca es un estado clave para observar las profundas reformas que aún requiere el marco jurídico electoral, estas reformas se tendrán que adecuar a las nuevas condiciones de pluralidad política y tendrán que atender algunos desafíos como: promover ampliamente la educación cívica y la participación ciudadana, garantizar equidad en la contienda electoral, limitar facultades al Poder Ejecutivo y al Congreso Local, transparentar el uso de los recursos públicos, blindar los programas sociales. Estos son los grandes temas pendientes en Oaxaca.

Oaxaca de Juárez, Oaxaca. 18 de Julio de 2007.

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